domingo, 24 de noviembre de 2024

Explorando lugares misteriosos: Los terrenos del Orfanato


¡Damas y caballeros, bienvenidos al Club de los Aristócratas!

Tras una larga, larguísima pausa que me ha impedido dedicarme todo lo que quisiera a este blog, he decidido tratar de recuperarlo para no perder fuelle. Quedan muchas cosas de las que hablar sobre Rule of Rose, y me da pena tener el blog tan abandonado, más si tenemos en cuenta lo mucho que he puesto en él. Así que hoy no me escaqueo y, como he podido rascar un par de horas libres, he preparado una entrada para vosotros. La siguiente vendrá cuando se pueda, ^^U

Hoy seguimos explorando los misteriosos lugares por donde Jennifer debe ir para completar su aventura. En el anterior, estuvimos recorriendo juntos el Sótano del orfanato; hoy vamos a salir un momento del edificio para explorar el exterior y sus alrededores. ¿Os venís conmigo?

 

El Orfanato Jardín de Rosas se erige en lo alto de una colina situada en las inmediaciones del pueblo de Cardington. Está situado en plena naturaleza, rodeado de árboles y abundante vegetación, lo que hace que sea casi imposible encontrarlo a simple vista, teniendo que recorrer un camino serpenteante hacia la colina para llegar al edificio. En las cercanías hay una parada de autobús, única conexión con el mundo exterior, y una farola que alumbra el banco donde esperan los pasajeros. Sin embargo, no parece que el autobús pase con mucha frecuencia, y no hay rutas alternativas para llegar al Orfanato. La atmósfera que se respira en este entorno es opresiva y da sensación de aislamiento, ya que no hay otros edificios en los alrededores. Quizá la casa de Gregory sea la única que está relativamente cerca, teniendo en cuenta que Wendy fue allí varias veces y Jennifer escapó y fue a pie hasta el orfanato. De camino hacia el hospicio, el sendero se divide en dos partes: El camino de la izquierda nos conduce directamente a la puerta principal del Orfanato, mientras que el camino de la derecha nos conduce al Cobertizo Destartalado, una cabaña situada cerca de un barrizal donde se guardan distintos aperos y herramientas. Aquí fue donde Jennifer encontró a Brown, la pizarra para escribir la Promesa de la Rosa y los utensilios con los que confeccionó a su primer Caballero Cubo; en el momento en que empieza el juego, Jennifer encuentra el Ticket de Embarque y el Collar de Perro, dos objetos muy importantes que utilizará en breve.

En este entorno es donde Jennifer empieza y acaba su historia si seguimos los pasos del Final Bueno. Es Joshua quien la trae al Orfanato mientras Jennifer le persigue (¿será esto una pequeña referencia a Alicia en el País de las Maravillas y la persecución del Conejo Blanco?). Es bastante curioso que Jennifer no pueda abandonar los terrenos del Orfanato en ningún momento pues, aunque continúe la senda de la carretera por donde se marcha el autobús, sus pasos la llevarán de regreso al inicio del camino. Obviamente, este juego no tiene la opción de un mundo abierto ni contempla la posibilidad de visitar otros rincones cercanos aparte del Orfanato, pero también se puede ver como una especie de manera de atrapar a Jennifer y obligarla a enfrentarse a los traumas de su pasado. El Orfanato no la ha abandonado, y no lo hará hasta el final del juego.

Nada más llegar a lo alto de la colina, nos encontramos con el Orfanato Jardín de Rosas, una gran casa rodeada por un muro de piedra que termina en una entrada principal cerrada con una gran cancela de barrotes. Además de esta puerta, el Orfanato dispone de una puerta trasera, pero es probable que sólo fuese usada por los niños y el personal del Orfanato, mientras que la principal quedaría reservada a los visitantes. De hecho, ante esta puerta suceden tres acontecimientos muy importantes en la aventura de Jennifer. En La Princesita, Jennifer ve a través de las rejas a Diana y a Eleanor con bolsas de papel en la cabeza mientras golpean una bolsa de arpillera, donde sabemos que se encuentra el perro Brown, aunque esta escena responde a un recuerdo del pasado que la mente de Jennifer le está mostrando. En El perro callejero y la princesa mentirosa, este lugar es el escenario de la batalla final entre Jennifer y un desquiciado Gregory. Si elegimos mal la opción, Jennifer puede quedarse atrapada para siempre en sus recuerdos traumáticos o salir del Orfanato triunfante. En el cuento Érase una vez, Jennifer se reúne por última vez con Wendy a las puertas del Orfanato, antes de dejarla atrás para siempre. La Puerta Principal se cierra en cuanto sale Jennifer, impidiéndole a Wendy salir tras ella. Esto guarda un gran simbolismo, puesto que es una manera de representar el avance de Jennifer, el haber superado sus traumas del pasado “cerrando” literalmente una puerta y dejándolos en sus recuerdos.

El orfanato también dispone de una puerta trasera, utilizada principalmente para que los niños y el personal del edificio pudieran entrar y salir con relativa libertad. Sabemos que Wendy solía utilizarla a menudo para dar paseos nocturnos; de hecho, es durante uno de esos paseos cuando se acerca a la casa de Gregory y descubre a Jennifer viviendo en el sótano de la casa. En el juego, Jennifer no puede entrar en el Orfanato por la puerta principal, algo que también puede ser simbólico: no es prudente enfrentarse a hechos oscuros del pasado de sopetón, entrando por la puerta grande; es necesario entrar por la puerta trasera e irse adentrando poco a poco, reconociendo el terreno, para no perder la cordura. Jennifer necesita mostrar su Ticket de Embarque para que le permitan pasar, acto muy significativo porque puede referirse a dos cosas: el recuerdo de Jennifer previo al embarque en el dirigible del que más adelante saldría como única superviviente, o una referencia a los niños del Orfanato cuando jugaban a los aviones, juego que perturbaba profundamente a Jennifer. O quizá sea algo más obvio, como una referencia clara a embarcarse en una nueva aventura, en un viaje al pasado.